jueves, 26 de febrero de 2009

Conociendo a Margarita


Ya que estamos en el 25 aniversario del colegio público Margarita Xirgu, vamos a hacer una pequeña y brevísima semblanza de la figura de Margarita Xirgu, no vaya a ser que alguno de nuestros alumnos no conozca lo más elemental de la biografía de esta mujer.

Esta gran actriz nació en 1888 en Molins de Rei (Barcelona). Desde muy pequeña sintió gran afición por el teatro, y con sólo ocho años obtuvo su primer aplauso, leyendo un manifiesto ante un grupo de obreros. Alternó sus primeros trabajos con pequeñas representaciones teatrales, hasta que en 1906 debuta profesionalmente.

En 1910 forma su propia compañía y representa "Salomé" de Oscar Wilde, lo que le da una gran popularidad. En 1914 se traslada a Madrid e interpreta obras de todos los grandes dramaturgos de la época: Pérez Galdós, Benavente, Valle-Inclán, Bernard Shaw, Casona, etc. En 1927 comienza la colaboración con García Lorca, del que estrenó todas sus obras.

Simultaneó las giras por España y las representaciones en la capital con giras por América, en 1913, 1921, 1923 y 1936, en que realiza un cuarto viaje del que no volverá más a España, ya que coincidió con el comienza de la Guerra Civil.

En América su éxito es imparable, y tras numerosas giras se establece en Montevideo, donde llega a ser directora de la Comedia Nacional de Uruguay. Sigue representando a los clásicos antiguos y modernos, a los grandes personajes femeninos a los que nadie como ella sabía dar vida (Bernarda Alba, La Celestina), y dirige obras de Lope de Vega, Shakespeare, Molière, Goldoni, Tirso de Molina, etc.

También hizo su aparición en el mundo del cine (en 1909 ya interpretó Guzmán el Bueno, y luego llevaría a la pantalla más trabajos, entre otros la versión para cine de Bodas de Sangre, de Lorca, en 1938).

Tuvo una dilatada carrera profesional. Todos sus trabajos estuvieron marcados por la misma intensidad dramática con la que vivió: se casó dos veces, permaneció exiliada en el extranjero, fue una apasionada actriz y directora teatral, realizó innumerables viajes y giras, a pesar de tener una salud delicada desde muy niña. También protagonizó algún escándalo, como cuando, al interpretar Salomé, le rescindieron el contrato por enseñar el ombligo (1910), o cuando estrenó "El malentendido" de Camus, en Buenos Aires, que fue prohibida por las autoridades argentinas a los tres días de representación.

Margarita Xirgu, considerada entre las mejores actrices mundiales del siglo XX, falleció en Montevideo, 1969, tras una intervención quirúrgica. En 1988, centenario del nacimiento de la actriz, repatriaron sus restos a su localidad de nacimiento, Molins de Rei.

Para saber todos los datos sobre la actriz que da nombre a nuestro colegio, se puede (y se debe) visitar el enlace a la página de la familia de Margarita Xirgu que hay en este mismo blog, y que os facilitamos también pinchando aquí. Encontraréis fotos de las obras de teatro, anécdotas curiosas y todo tipo de documentación y referencias sobre ella; están incluso nuestra placa del colegio y nuestros logotipos del 25 aniversario.

Las fotos que aparecen en esta entrada proceden de la página web de la familia Xirgu, y recogen imágenes de los archivos familiares.

jueves, 19 de febrero de 2009

Llega el Carnaval

Parece, por los comentarios que observamos diseminados aquí y allá en este blog, que los alumnos y alumnas del colegio esperan este año con bastante ilusión y cierta impaciencia la llegada del carnaval. Está bien que a mitad del curso nos concedamos unos momentos de relax, para disfrutar con los amigos, con los compañeros y profesores.

En su origen, el Carnaval tiene un sentido religioso: la necesidad de divertirse a fondo durante unos breves días antes de que llegue el momento del arrepentimiento; ese momento comienza con el Miércoles de Ceniza, que abre los 40 días que dura la Cuaresma cristiana, un período de preparación a la Pascua. Durante este período no se puede comer carne los viernes, por eso el "carnaval" (¿del italiano carnevale?) personifica la permisividad para ello y, por extensión, para todo. Los 40 días que dura la Cuaresma (en realidad 46, pero no se cuentan los domingos) simbolizan los 40 días del diluvio, los 40 años del éxodo del pueblo judío por el desierto, los 40 días que pasó Moisés en la montaña, los 40 días de Jesús en el desierto, etc. Es decir, las dificultades que nos esperan.

La tradición de celebrar los días de Carnaval antes de la Cuaresma tiene elementos que perviven de tradiciones anteriores al cristianismo, sobre todo de las Saturnalia romanas y otras fiestas dionisíacas mediterráneas. En otras latitudes han tomado prestados símbolos de sus respectivas regiones (andinas, africanas, etc.). Con el tiempo, el carnaval se ha ido disociando del elemento religioso cristiano que tenía desde el s.IV, y tiene un sentido principalmente lúdico y festivo.

Es en ese marco lúdico-festivo en el que nos movemos los colegios cuando celebramos el carnaval. Es una actividad que da mucho juego porque aglutina acciones educativas desde muchos ámbitos: artísticos, musicales, literarios, y permite poner en marcha mecanismos de coordinación entre los diferentes niveles de un centro. Además ofrece a los alumnos la posibilidad de divertirse, disfrazarse, disfrutar con sus compañeros, salirse de la rutina y alterar por unos momentos la vida académica.

Este año, en el Margarita, como ya han apuntado algunos alumnos en los comentarios a otras entradas, para el lunes 23 hay consigna de que cada uno lleve alguna margarita, de la forma, color, tamaño y material que desee. El martes 24 se podrá venir disfrazado y habrá baile de disfraces, y el miércoles 25 realizaremos el manteo del pelele y el entierro de la sardina, con padre cura, plañideras y demás elementos procesionales. Con ella enterraremos -quemaremos- cualquier resto de negatividad -escrito en las escamas de la sardina- y quedaremos regenerados para seguir nuestro camino con mayor fuerza. Que así sea.

P.D. Las fotos son del Carnaval de 2008.

lunes, 16 de febrero de 2009

Lo que cuentan los niños

Dicho así, parece que nos refiramos a lo importantes que son los niños, y en verdad lo son; para nosotros los más importantes, y todo nuestro trabajo gira en torno de ellos, de su aprendizaje, maduración y aprovechamiento.

Pero nos estamos refiriendo en esta ocasión a contar en el sentido de narrar, relatar y escribir textos más o menos literarios. Resulta que hemos puesto en marcha un concurso literario este trimestre, en el marco de las actividades relacionadas con el XXV Aniversario del colegio, y los niños y niñas del centro están participando mucho y bien. Hay dos categorías: padres/familiares y alumnos. Y hay dos modalidades: poemas y relatos cortos, y la única condición para escribir es que lo redactado tenga alguna relación con el colegio Margarita Xirgu. El resto de las bases habla de la extensión máxima, de la presentación, etc. -formalidades-.

Ahora que están empezando a entregar los trabajos, echando un vistazo por encima, nos está gustando el tono de las historias, de una calidad más que aceptable teniendo en cuenta la edad. Pero sobre todo nos está encantando el cariño con el que están realizando sus relatos, el cuidado que están poniendo en la presentación y, sobre todo, el aire ufano de lo bien hecho que les envuelve cuando los entregan. Y es que no hay como dar un motivo que les atraiga para que nuestros chavales nos sorprendan.

Lo mejor de todo es la emoción que logran transmitir por su colegio cuando lo nombran, cuando lo relacionan en el contexto de su cuento o relato, siempre en positivo, siempre con afecto.

Todavía hay plazo para que entreguen su obra, hasta el 18 de marzo. Va a resultar complicado elegir los textos que configurarán un libro conmemorativo del evento, pero desde este momento, para nosotros todos son ganadores.

lunes, 9 de febrero de 2009

La ortografía y las nuevas formas de comunicación.

Venga a esforzarnos en el aprendizaje de la correcta ortografía, venga a leer y leer para aprender a escribir correctamente (a ver si viendo las palabras bien escritas se nos quedan...), y llega la tecnología, y ¡zas!, de un plumazo se carga todas las buenas intenciones de la escuela, de los maestros, de los padres y de los propios alumnos en lo que se refiere a escribir con corrección.

Porque los avances tecnológicos, en telefonía e informática, son de agradecer, imprescindibles ya para todo el mundo; pero no me negarán que le han hecho un flaco favor a la ortografía. Si ya era un problema aprenderla bien cuando todos tiraban en la misma dirección, ya me contarán si el problema no se multiplica exponencialmente ahora que, para escribir con los nuevos medios de comunicación (el messenger, los chats, los SMSs), se hace tabula rasa de cualquier norma, se fía todo a convenciones mínimas sin reglas fijas y se reduce el mensaje a una especie de jerga para iniciados.

Y la culpa no es de la informática; hay cientos de páginas web donde se estudia con seriedad la ortografía y se dispone de ejercicios para practicarla a todos los niveles, de forma amena y divertida. Tampoco es culpa de la telefonía, que a fuerza de mejorar nos aproxima cada vez más y con mayor naturalidad, y ofrece un amplio espectro de posibilidades multimedia que nos facilitan la vida un poco más (¿?).

Si hay que responsabilizar a alguien o a algo de esa caída en picado de la norma ortográfica, es exclusivamente a la necesidad compulsiva de comunicación inmediata con los semejantes que tenemos todos, a esa especie de fiebre comunicativa que nos envuelve cuando tenemos un teclado delante para decir cosas, y decirlas ya... y que nos contesten, cuanto más rápido mejor. Bueno, a eso y a la evidente dificultad que la ortografía tiene para todos, especialmente para los que nunca la aprendieron o aprendimos. Por no hablar de la sintaxis y la gramática. Así sale lo que sale. Les sugiero que simplemente lean los mensajes que aparecen a pie de pantalla en tantos y tantos programas de televisión.

Pero seamos serios. Podemos chatear, hablar por el messenger y escribir SMSs sin que ello suponga un atentado contra todas las reglas ortográficas (digo todas, y tal vez me quede corto); hagamos un esfuerzo por escribir con corrección, aunque no sea más que por ofrecer a nuestros amigos, compañeros, semejantes en general, un mensaje que no necesite ser leído tres veces para interpretar qué vocales faltan -ni que fuera árabe-; aunque no sea más que por la deferencia a los demás de un trabajo bien hecho y la satisfacción de poder decir: la tecnología la manejo yo, me comunico yo con quien quiero, pero escribo bien, porque quiero y puedo.

martes, 3 de febrero de 2009

La Biblioteca Escolar. Forja de lectores.

Está claro el papel fundamental que la familia desempeña cuando de inculcar hábitos se trata. En la creación de hábitos lectores no podía ser una excepción. Los más pequeños, con sus actitudes de imitación, suelen reflejar de forma bastante fidedigna el status que ocupa la actividad lectora en su casa. No siempre es así, pero en general se desprende que, si en una casa los adultos leen con frecuencia, si se dedica tiempo e interés a ello, los niños suelen adquirir el hábito de lectura sin ninguna dificultad. En los colegios lo sabemos bien.

¿Por qué somos siempre tan insistentes con el hábito de la lectura? Sobre todo, estamos convencidos de que la lectura beneficia a quien la ejercita: abre la mente a nuevos mundos, capacita al entendimiento para nuevos retos y nos permite conocer otros universos sin movernos del sillón o la sala. Nos da la oportunidad de soñar, de imaginar y de recrearnos. Además nos pone en contacto con otras formas de pensar, de ver la realidad, y nos obliga a ejercitar nuestra capacidad crítica ante las cosas.


Por eso en todos los centros escolares la Biblioteca, tanto la Central como la de cada aula, es un espacio privilegiado y especialmente cuidado. Un escenario donde los niños pueden ser protagonistas de sus propias fantasías, porque un libro es una puerta abierta a la imaginación, a la interpretación. Se dedica mucho tiempo y bastante presupuesto a dotar a las Bibliotecas de libros amenos, adaptados a la edad, instructivos, que inviten a los niños a leer con ganas y con asiduidad. A lo largo de toda la escolaridad, los alumnos disponen de cuantas posibilidades están en mano de los centros para acudir a los libros como el que va a ver a un buen amigo. Y pueden elegir, pueden demostrar su carácter, sus intereses y preferencias.


Las Bibliotecas escolares son lugares distintos, donde el alumno se encuentra en un entorno agradable, atractivo, que le ayuda a enamorarse de la lectura. La nuestra, por ejemplo, es un castillo -La fortaleza de las palabras- con dragón y todo (Safira, nuestra mascota). Todos recordamos nuestros años infantiles, y tenemos en la memoria unos cuantos títulos que nos marcaron para siempre como lectores.


En la medida que en la escuela consigamos este objetivo, estaremos facultando al niño para que más adelante sea capaz de realizar elecciones inteligentes, adquiera el gusto por lo bello, por lo elaborado, por lo bien hecho, y habremos contribuido a inculcar en su carácter fragmentos de perfección.